por Alejandro Díaz Pinto

Ldo. en Periodismo y Máster en Patrimonio Histórico-Arqueológico

La Dra. María Elena Martínez culmina por fin la fase editorial de El Zaporito: 300 años de historia. Afronta ilusionada las semanas previas a la presentación mientras reflexiona sobre personajes históricos que ya son como de la familia; «Juan Domingo Saporito era importante, noble y rico, aunque con cierto punto aventurero. José Micón, un hombre trabajador que con su tenacidad salió de grandes apuros legales»

Con el libro impreso en sus manos, la autora no puede sino emocionarse al contemplar la materialización de su trabajo. Aquel en el que ha invertido tantos años, heredando una investigación que sobre un rincón de San Fernando comenzó su padre, Pedro Martínez Chamorro, a fines de los setenta, y del que hoy, y ella lo sabe, estaría muy orgulloso.

María Elena Martínez es Dra. en Filología Clásica, aunque mayormente conocida en La Isla por su vinculación al barrio del Zaporito. Presentará su nuevo libro el viernes 6 de octubre. Pero al contrario de lo que muchos piensan, no se trata de una reedición de El Zaporito, su nombre, su origen y su historia (1992). En absoluto. Partiendo de aquella publicación necesaria, aunque discreta, María Elena se ha dedicado las últimas dos décadas a recabar información sobre Juan Domingo Saporito, José Micón, Gaspar de Molina y Zaldívar o Manuel Martínez Caballero; todos los personajes históricos que contribuyeron en algún momento a que el Zaporito sea lo que conocemos. A que oculte tras su piedra ostionera una historia que gracias a esta investigadora infatigable en breve podrán disfrutar los isleños.

A un mes de la presentación se declara «contenta, satisfecha, aunque el tema es infinito y siempre quedarán hilos de los que tirar». Sabe que nunca se agotarán las fuentes, y que, por tanto, tampoco dejará de investigar porque «es algo que va conmigo y continuará yendo conmigo, disfruto con cada descubrimiento, con cada novedad». No obstante reconoce que «el trabajo ha quedado muy perfilado en todas sus vertientes» como corroboran sus 381 páginas y más de 540 notas al pie siguiendo la normativa de la Universidad de Córdoba para facilitar el acceso a las fuentes. Como profesional, considera que «la Historia no es de nadie y a la vez de todos… cada aporte se sustenta sobre trabajos previos y será la base de otros que vendrán después».

Además del contenido, la autora se ha hecho cargo de la maquetación «cuidando al máximo cada detalle»; desde el color del papel hasta el tamaño de la letra, pasando por la colocación de imágenes y gráficos «de manera que el libro sea visualmente atractivo tanto para el lector curioso como para investigadores profesionales», concreta. No en vano es una mujer moderna, consciente de que «vivimos en la cultura de la imagen», y a la vez profesora de vocación, por lo que no ha querido pasar por alto la función didáctica de esta publicación.

Solo ha delegado en otra persona para la elaboración de la portada. Antonio Belizón Ibáñez ha diseñado un montaje con el que la investigadora está encantada por haber sabido fundir, como ella deseaba, el pasado y el presente de San Fernando. El primero mediante un candray —magnífica fotografía de Carlos Valverde— en homenaje a la carpintería de ribera que tan importante fue para la ciudad. El segundo con la imagen del molino, reciente, como símbolo de la etapa presente y también pauta de futuro. «Debemos aprovechar el patrimonio que tenemos, conservarlo y desarrollarlo como materia prima, motor de desarrollo económico para La Isla», reivindica. «Le pedí a Antonio que envolviera el concepto en los colores del agua, del cielo y de la piedra ostionera como seña de identidad del barrio, del que ha sabido captar toda su esencia».

Esta idea de relacionar el pasado con el presente se extrapolará, de hecho, a la propia presentación. Le acompañará en la mesa Juan García-Cubillana, quien «prologó el primer libro y conoció de primera mano el trabajo de mi padre con quien mantenía una gran amistad», pero también Ana Saez, profesional que dirigió el trabajo de recuperación arqueológica del molino y «me cedió desinteresadamente todo el material». Junto a ellos estará la alcaldesa, Patricia Cavada, de la que destaca las facilidades brindadas desde el primer momento, mostrando un gran interés y poniendo a su disposición todos los medios del Ayuntamiento. «Se ofreció a presidir el acto y no sabe cuánto se lo agradezco».

Aunque Patrimonio La Isla ya anticipó algunas de las grandes novedades que traerá consigo el volumen, cabe recordar aspectos como la apariencia, hasta ahora desconocida, que presentaba el muelle en el siglo XIX. «Hay detalles arquitectónicos sorprendentes». También, una mayor precisión en los límites de la parcela que en 1700 adquirió Juan Domingo Saporito, embrión del actual barrio. La autora ha localizado asimismo documentos verdaderamente interesantes sobre sus primeros propietarios, Saporito y Micón, de hecho «sé dónde están enterrados». Del segundo posee su partida de defunción mientras del primero, «un documento redactado y firmado por su albacea hace 300 años que permite entender por qué Juan Domingo volvió a Génova e incluso visualizarlo con todo detalle en su lecho de muerte». Esto, especifica, «es lo que mi padre tanto buscó». El trabajo también aborda los problemas de Micón a la hora de poner en funcionamiento el molino, «no se reducen al pleito con su vecino, el Duque de Arcos», explica; la teoría documentada de la imagen que albergó la hornacina en la fachada del molino; la vida cotidiana de éste y su molinero o los pequeños y medianos negocios que proliferaron en el barrio en la segunda mitad del XIX «convirtiéndolo en una especie de polígono industrial». Uno de los momentos más emocionantes, explica, fue ver la firma de su bisabuelo, Miguel Martínez Ramos, cuando compró los terrenos hace 121 años.

Un trabajo de lujo, en definitiva, con un diseño de lujo que contará también con una prologuista a la altura; la propia alcaldesa de París, Anne Hidalgo, es historia reciente del Zaporito.

Cartel de la presentación que tendrá lugar el 6 de octubre en el Centro de Congresos.