por Alejandro Díaz Pinto

La autora isleña MJ López (Entre la tierra y el olimpo) celebró el Día del Libro en Colegio San Agustín de Chiclana llevando a escena las más famosas obras de la literatura universal. Actualmente trabaja en la finalización de su segunda novela histórica.

Hay quien tiene la suerte de dedicarse profesionalmente a aquello que le apasiona. Casi siempre tras invertir muchos años de su vida en una preparación exhaustiva que poder llevar a la práctica. Carrera, idiomas, másteres… todo cuenta -o no- a la hora de que los nuevos profesionales logren labrarse un hueco en el mundo laboral, y en el caso de María José López, más conocida como MJ, ya es una realidad a poco de ver publicada su segunda novela y trabajar inculcando a los alumnos de San Agustín su amor por la literatura.

Esto último se ha materializado con la celebración del Día del Libro a través de la interpretación. MJ no sólo se ha conformado con impartir la teoría de rigor, también quiso llevarla a la práctica a través de la interpretación alternando lectura, teatro e incluso algunos guiños a la Historia del Arte. El método; escenificar mitos clásicos, cuentos populares y algunas obras clave de la literatura española a través de sus alumnos de Secundaria en el Centro de Iniciativas Juveniles Box de Chiclana de la Frontera.

Ha sido un trabajo arduo desde su adaptación por parte de esta profesional, Lda. en Filología Hispánica, escritora y profesora de Lengua y Literatura, que viene dedicando media sesión semanal al ensayo de las obras seleccionadas, todas ellas relacionadas con los contenidos impartidos durante el curso escolar. La función comenzó con el mito clásico El Minotauro -base de la primera novela de la autora- y el cuento de Perrault La Bella Durmiente, ambos escenificados por los alumnos de 1º de ESO. A estos se sumó el Soneto XIII de Garcilaso de la Vega que adapta, a su vez, el mito de Apolo y Dafne. En él, mientras un alumno recitaba el poema, otros escenificaban el grupo escultórico de Gian Lorenzo Bernini. El cuento de Doña Truhana, incluido en El Conde Lucanor de don Juan Manuel, fue la segunda obra seleccionada para este curso porque «les era familiar, al fin y al cabo no deja de ser una versión de la conocida historia de La Lechera que a todos nos han leído alguna vez de pequeños». Una manera, según López, de «hacerles entender que es mejor mantener los pies en la tierra».

El nivel fue ‘in crescendo’ con el romance medieval a dos voces de los alumnos de 3º, ya que «la Edad Media tiene una presencia importante en el temario y quise que comprobasen que su rima, fácil, les permitiría aprender y recitar un poema de memoria». No podía faltar El Quijote en un Día del Libro por ser la novela más universal de la literatura española.

Finalmente los alumnos de 4º, que habían comenzado sus clases con el Romanticismo español, escenificaron Don Juan Tenorio y La Casa de Bernarda Alba. «Teníamos que reivindicar la figura de Lorca», explica. Entre otras razones, «había muchas alumnas con aptitudes interpretativas e ilusión por encarnar a sus personajes, al tiempo que hacen un análisis comparativo entre la situación de la mujer de entones y en la actualidad». Como puede apreciarse, MJ no deja de lado su compromiso con los temas de género.

Es esta, en definitiva, una actividad con la que «queríamos remarcar el teatro, que los alumnos se interesen por la interpretación y fomenten su competencia artística», explica. Ellos han sido de hecho los encargados de escoger sus papeles en la mayoría de los casos, «se ofrecieron a representarlos, lo que se traduce en la gran implicación del alumnado». López, por su parte, les orientó en la caracterización, supervisando el proceso creativo y aconsejándolos una vez concluyó la adaptación de las diferentes obras literarias.

«Alumnos y padres han manifestado su satisfacción, aprendiendo a dar más valor a la literatura a través de la escena y mejorando las relaciones humanas y personales», concluye MJ, quien además desea agradecer el gran apoyo recibido por el centro para la realización de esta actividad.

Una joven novelista

Profesionalidad dentro y vocación fuera del centro. Esto es lo que ha llevado a MJ López a desarrollar una segunda carrera como escritora que, de forma paralela, bebe de los mismos temas que imparte cada día en clase a sus alumnos. Su primera novela se titula Entre la tierra y el olimpo, una revisión del Mito del Minotauro donde construye una personalidad propia para personajes clásicos como Ariadna, princesa de Creta, Teseo de Atenas o el dios olímpico Dioniso. Aunque algunos la circunscriben en el género fantástico por recurrir a la mitología, la autora insiste en que «se trata de una novela histórica, porque los griegos creían ciegamente en aquellos mitos. No es como inventarse de cero una historia, para ellos era 100% real».

Una nueva incursión en el mundo clásico centrará su segunda historia, ya en fase de finalización. En este caso, adelanta, «alternaré dos líneas temporales; una actual y otra ambientada en la Pompeya del siglo I d. C., momento de la erupción del Vesubio». Se tratará por tanto de una novela 100% histórica y centrada en un acontecimiento de envergadura respecto al que advierte «seré muy fiel en este homenaje». A ello no solo contribuyen, por cierto, sus estudios humanísticos, sino también las veces que ha acudido a este yacimiento con la intención de nutrirse de su esencia, ‘in situ’,y la gran cantidad de bibliografía consultada a tal efecto. Próximamente ofrecerá nuevos datos sobre el lanzamiento.