por Alejandro Díaz Pinto

El fotógrafo Alfonso Vázquez, tesorero de la Asociación de Fotografía Isla de León, protagoniza su ‘primera gran exposición’ en el Castillo de San Romualdo: Al Sur del Sur.

El Castillo no es un edificio árabe. Se trata de una construcción cristiana, posterior a la Reconquista de Alfonso X ‘El Sabio’ aunque con cierto aire orientalizante. De ahí que se potencie su uso con un programa de exposiciones relacionado con esta cultura entre el que no podía faltar Alfonso Vázquez dada su vinculación sentimental -y artística- con Marruecos. Antonio Saez, subdirector del Museo Muncipal, era conocedor de ello y le propuso una muestra con sus mejores fotografías.

Fotos que en palabras del propio autor «hice como turista, para mi disfrute personal, a lo largo de mis constantes viajes al norte de África». Las miles que guardaba desde el inicio de la era digital -las más antiguas se hicieron con cámara analógica- eran suficientes para proceder a seleccionar las afortunadas. Un proceso que se ha prolongado durante más de un año y que, tras un primer lote de 40, «han quedado reducidas a 16, eso sí, en un formato más grande que el pensado originalmente», explica Vázquez. Las mismas están distribuidas en diferentes grupos centrados en aspectos como la ciudad, la naturaleza, los niños o las multitudes; el aspecto más costumbrista de unas ciudades donde se hace vida en la calle, donde los mismos señores ocupan el mismo banco cada día y cada noche los hosteleros montan, de manera improvisada, sus restaurantes.

«Me las he visto y deseado para hacer la elección», indica, pues «ninguna me parecía lo suficientemente buena», concreta, quizá demasiado exigente con su producción. Entiende, sin embargo, que debía hacerlo él porque «si otro decide por ti, la muestra no es completamente tuya». Marrakech, Casablanca, Tánger… son algunas de las ciudades captadas en todas sus dimensiones por el fotógrafo desde el año 2000, cuando viajó a África por primera vez. La exposición incluye fotografías de entre 2007 y 2015 pero «aunque tienen fecha, daría igual no ponerla porque el escenario siempre es el mismo año tras año». Esto es para Alfonso uno de sus encantos: «puedes hacer la misma foto una década después». Ya lo dio a entender el fotógrafo Harry Gruyaert, especialista en el tema.

El patrón que las une a todas es el ‘blanco y negro’, «permite dar rienda suelta a la imaginación del fotógrafo». También, explica, lo hace por comodidad puesto que «trabajar el color es más difícil de lo que parece». Destacan por incluir la presencia humana, pero muy minimizada, de hecho, «la mayoría de las imágenes en las que aparecen personas están hechas con mucha discreción, esperando el momento oportuno» y en la mayoría de los casos se les observa a través de un marco improvisado; desde el ojo de buey de una casa hasta las barras de madera de un barco. También, incide, «me gusta contar varias historias a través de la misma fotografía». Los espectadores podrán comprender esto in situ hasta el 25 de mayo.

El autor señala una de las fotografías expuestas.

El fotógrafo

Alfonso Vázquez es ingeniero industrial, aunque siempre ha ejercido como informático en una entidad bancaria. Nacido en Badajoz, criado en Ronda y residente en San Fernando desde 1987, lleva toda la vida haciendo fotos aunque nunca con la intención de exponerlas. Sí las comparte en cambio a través de su página web (www.avazquez.es) y desde su reciente jubilación ha cogido con fuerza esta afición junto a sus compañeros de la Asociación de Fotografía Isla de León.

Pilar Moreno, Ángel López o el propio presidente de AFIL, Ignacio Escuín, le acompañaron en la última muestra colectiva organizada por la entidad en la Casa de la Cultura: una particular visión de los lugares más emblemáticos de San Fernando.