por Alejandro Díaz Pinto

La arquitecta y pintora María del Mar Robert cumple un año al frente de su taller de expresión artística. Su imaginación para ‘dibujar bodas’ es cada vez más aplaudida en Instagram.

<<En un mundo que cambia constantemente es la creatividad lo único que permanece vigente>>

María del Mar Robert lo tiene claro. Tanto como el ‘agua’ de su nueva iniciativa. Por eso, tras muchos años dedicada a su profesión, la Arquitectura, decidió dar un giro a la estabilidad de la que hasta entonces gozaba para arriesgarse con un proyecto que en breve cumplirá su primer aniversario. Aguademar Taller Creativo nació con la vocación de «fomentar la creatividad de la gente», pero no solo en su faceta meramente artística, sino también como medio terapéutico para expresar sentimientos, para favorecer la autoestima y «adquirir una cultura visual que permita a los niños gestionar un mundo dominado imágenes».

Pero no solo no renuncia a su formación como arquitecta profesional, que eligió por considerar «una comunión entre la ingeniería y las humanidades», sino que «me permite abordar los espacios con una visión artística diferente». Especialista en interiorismo y diseño de mobiliario -como puede apreciarse en el centro- cree firmemente en la comunión entre lo artístico y lo técnico. «Todo arquitecto tiene un brote artístico, y la acuarela es perfecta para dejarlo salir por su base fuerte de dibujo, por la necesidad de planificación previa dada la rapidez de ejecución y su no reversibilidad: pincelada que das, pincelada que se queda». Un «ejercicio mental estimulante» que, además, «presenta muchas analogías con la vida». Su fluidez, lo que sugiere -pero no evidencia- logrando que el espectador retroceda y vuelva sobre ella… «la convierten en el medio perfecto para canalizar emociones».

Tales conclusiones se traducen en talleres de expresión artística para los más pequeños y de dibujo y acuarela para preadolescentes, de lunes a viernes en calle Guardiamarinas, 1 (San Fernando). Un estudio reestructurado por ella donde cada elemento tiene su lugar, «diáfano, luminoso, que parecía esperarnos a nosotros». Como complemento, además, se desarrollan otros talleres impartidos algunos sábados por grandes profesionales especializados en diversas técnicas. Es el caso de la ilustradora gaditana Rosa Olea, que ya ha protagonizado dos sesiones sobre tipografía y técnicas creativas; el pintor Pepe Palacios, muy conocido por su dominio del carbón; o los arquitectos José María Cortés y Juan Ariza que se centraron en ‘collage’ y ‘bocetos’ respectivamente. También han acudido -y acudirán- acuarelistas de renombre a nivel nacional como J. M. Mendo o Joan Coch, según adelanta la anfitriona.

Todo ello, explica Robert, «está encaminado a configurar un verdadero foco de encuentro entre artistas». una carrera de fondo que ya está dando sus primeros frutos y celebrará el primer año abierta al público con una demostración en vivo en el taller y sesión de dibujo urbano con niños, al aire libre, en plena calle, tal cual desarrollan su arte los miembros del movimiento internacional ‘Urban Sketcher’ al que María del Mar también pertenece junto con otros artistas de la zona como Jonatan Alcina, entrevistado por Patrimonio La Isla hace pocas semanas.

Desplegable original con las escenas reales de una boda reciente.

Bodas dibujadas

La creatividad de esta artista no se reduce a lo plástico o tangible, insiste, «me gusta experimentar, siempre debemos reinventarnos». Y paralelamente a estos trabajos ha desarrollado otra faceta que cada día cobra más protagonismo en redes como Instagram. La bautizó como Bodasdibujadas ya que no es más -ni menos- que eso. Ilustraciones creadas en exclusiva para novios e invitados que buscan algo diferente. Viajes en la vida de la pareja, retratos familiares con seres queridos que ya no están, objetos simbólicos o el ‘frikismo’ de alguno de los consortes por el coleccionismo o temas determinados. Estas obras, a su vez, pueden destinarse a las invitaciones, a los sobres, a todo tipo de recuerdos que partan de la imaginación de quien lo encargue o a las propuestas de la propia artista, que sabe como nadie recoger las necesidades para traducirlas en obras de arte. Desde el ‘sitting plan’ -fichas temáticas para identificar las mesas- hasta reportajes dibujados a modo de desplegables que recogen los momentos más importantes del enlace, como muestra la fotografía adjunta.

Eso sí, María del Mar se ocupa solo de la labor artística adaptada al formato solicitado por el demandante. Ella le entrega la obra original que normalmente se queda la pareja en caso de que sea la que lo encargue, y sobre el mismo se reproduce, posteriormente, el material necesario para la celebración de una ‘boda dibujada’. Aguademar Taller Creativo no ofrece hasta el momento servicios de maquetación ni de impresión, solo ilustración y diseño.